A menudo te han dicho que estar bien significa no tener problemas ni sufrir. Cualquier tipo de malestar que tengas se convierte entonces en un signo claro de que algo va mal en tu vida. Esto no es normal, te dices y te esfuerzas en solucionarlo a toda costa o apartarlo a un lado y evitarlo.
Sin embargo el sufrimiento es una parte natural del ser humano y está siempre presente de alguna forma en tu experiencia. ¿No te sería más útil aprender a relacionarte con tu malestar de otra forma?
¿Recuerdas una situación difícil que te ayudó a crecer o aprender algo importante?
¿Cómo cambia tu perspectiva sobre los retos diarios al pensar que son parte normal de la vida?
La presión de estar siempre bien
No te hablo de rendirte ante el sufrimiento y pasarlo mal en este «valle de lágrimas» como se suele decir sino entender que estás luchando contra algo que en su esencia no va a desaparecer nunca porque forma parte de este misterio que es vivir.
Aceptar el sufrimiento es liberarte de la presión de tener que estar siempre bien, lo que te permite abordar tu experiencia con mayor honestidad y valentía.
Esto es lo que hay,
y ahora ¿qué haces?
¿adónde quieres ir?
Días de lluvia
Todos pasamos por momentos difíciles. Es como tener días de lluvia, no te gustan pero sabes que la lluvia es necesaria y algo natural. Imagina que tienes prisa porque tienes una entrevista de trabajo, ¿qué haces?:
a) puedes quedarte en casa esperando a que termine de llover y perder la entrevista
b) llamar para decirles que mejor organizar la cita para otro día que no llueva
b) coger un paraguas o un chubasquero y salir a la calle
En las dos primeras opciones más que seguro que pierdes el poder optar al trabajo que estás buscando. En la tercera te relacionas de forma diferente con el malestar que supone caminar bajo la lluvia porque;
… has aceptado que llueve
… continúas sintiendo malestar porque no es nada cómodo caminar mientras llueve
… pero sales con tu paraguas a la calle porque tu objetivo de conseguir el trabajo es más fuerte y te guía de forma más efectiva
¿Qué pasaría si esa lluvia no fuera física sino mental? ¿Qué pasaría si las gotas de lluvia fueran ideas de falta de valía personal, de miedo al rechazo y al fracaso? ¿Es mejor quedarse en casa o aprender a relacionarte con ese malestar y a pesar de él (y no en su ausencia) acudir a la entrevista?
Libros para días de tormenta
«El Arte de Ser Feliz» de Arthur Schopenhauer: una reflexión filosófica sobre cómo enfrentar el sufrimiento y encontrar contentamiento en medio de las dificultades.
«La Trampa de la Felicidad» de Russ Harris: Este libro introduce la terapia de aceptación y compromiso (ACT), que enseña cómo vivir una vida rica y significativa, aceptando el dolor y el sufrimiento como parte de la experiencia humana.
«Antifrágil: Las Cosas que se Benefician del Desorden» de Nassim Nicholas Taleb: explora cómo podemos beneficiarnos y crecer a partir de la incertidumbre, el azar y el desorden, en lugar de simplemente intentar resistirlos
«El Don del Dolor: Por Qué Sentimos Dolor y Qué Podemos Hacer al Respecto» de Paul Brand y Philip Yancey: Ofrece una perspectiva sobre cómo el dolor es una parte esencial de la experiencia humana.
Coach Personal acreditado por ICF. Máster en Psicología Clínica y Recursos Humanos. Consulta Presencial y Online en Santa Cruz de Tenerife. Te acompaño en la búsqueda de tu Plan de Acción. Información de Contacto.
