Seguro que si te pregunto qué emociones construyen me dirás que las positivas. Y tienes razón, aunque no del todo. Todas las emociones tienen una función adaptativa, nos ayudan a adecuarnos a lo que estamos viviendo. Nos construyen en la medida en la que dejamos que cumpla su función. Esto es clave.
Si entendemos cual es la función de cada emoción nos daremos cuenta de dos cositas muy interesantes. La primera es que la diferenciación, la etiqueta, de emociones positivas y negativas es absurda. No hay emociones buenas ni malas, eso es un juicio de valor basado en la vivencia agradable o desagradable que experimentamos, pero todas son necesarias y nos dan información valiosa. Lo segundo, es que no hay nadie luchando contra mi dentro de mi cabeza, al contrario, todas las emociones nos ayudan, pero hay que entender qué quieren y por qué eligen esa forma para expresarse.
Todas las emociones son buenas y todas nos ayudan. Pero de diferente forma y con diferentes fines.
A las emociones «negativas» les interesa la supervivencia. Cuando termina el día y sigues vivo tu mente se pone una medallita porque ha conseguido lo que quería. Son automáticas, aparecen como las señales que nos encontramos en la autopista. Cuidado no vayas tan deprisa, enciende las luces que entras en un tunel… Nos avisan de peligros y eso está muy bien aunque hay veces que el peligro no existe como tal, lo que nos crea problemas de ansiedad, estrés, etc…
Por el contrario las emociones «positivas» nos dan mayor flexibilidad a la hora de enfrentarnos al medio, hacen más grande nuestro espacio mental y potencian aspectos como la creatividad y la sociabilidad. Son mucho más transitorias, desaparecen relativamente rápido, pero ayudan a desarrollar recursos personales incrementando el tamaño de los repertorios de conducta que solemos usar.
Así que, cuales son las emociones que nos construyen? Pues todas, de diferente forma, pero todas nos construyen. Cierto es que las más problemáticas suelen ser las negativas, es normal, no tenemos la misma experiencia si en un momento nos sentimos ansiosos o preocupados en vez de tranquilos o sociables. Pero todas ellas son señales.
Prueba la próxima vez que notes una de estas emociones mal llamadas negativas a no echarle la culpa al mensajero sino simplemente a recibir su mensaje. Qué me está queriendo decir esta emoción en este momento? Qué me quiere decir?
Coach Personal acreditado por ICF. Máster en Psicología Clínica y Recursos Humanos. Consulta Presencial y Online en Santa Cruz de Tenerife. Te acompaño en la búsqueda de tu Plan de Acción. Información de Contacto.